El primer ministro británico, Sir Keir Starmer, realizó un viaje de dos días a Mumbai para negociar un acuerdo comercial entre el Reino Unido y la India. El encuentro se concretó meses después de negociar los primeros avances de un acuerdo comercial junto con Narendra Modi, primer ministro indio.
El objetivo de este acuerdo es afianzar sus relaciones económicas luego del impacto causado por los aranceles impuestos por Donald Trump, quien impuso gravámenes del 50% a los productos provenientes de la India y, en menor medida, a los del Reino Unido. El Estado isleño, sin embargo, consiguió un acuerdo comercial con los norteamericanos en mayo.
Además, gracias al convenio, se crearán alrededor de 7000 nuevos puestos de trabajo en el Reino Unido, debido a las inversiones provenientes de la India para continuar afianzando las relaciones comerciales entre estos dos Estados a futuro. Por ejemplo, un estudio cinematográfico que produce películas de “Bollywood” rodará filmes en la isla británica, lo que generará millones de libras en ganancia y miles de puestos de trabajo.
A su vez, Starmer alentó a empresas británicas a invertir en la India, tales como Graphcore, Tide, EY, entre otras. Por otro lado, universidades como la de Lancaster y la de Surrey abrirán nuevos campus en India. En palabras de Sir Keir: “Me complace enormemente que más estudiantes indios puedan beneficiarse de una educación británica de primer nivel en un futuro próximo, lo que fortalecerá los lazos entre nuestros dos países, a la vez que inyectará millones en nuestra economía y fomentará el empleo en nuestro país”. El acuerdo no sólo reforzará las conexiones financieras de ambos Estados, sino que a su vez ayudará a fomentar la educación de miles de jóvenes del territorio indio.
Sin embargo, es de público conocimiento que el gobierno indio tiene cierta simpatía hacia su homólogo de Rusia, Vladimir Putin. India continúa comprando petróleo ruso, lo que le permite financiar el conflicto bélico que se está llevando a cabo en Europa del Este. A raíz de este hecho, Sir Keir - que tanto él como su gobierno demuestran apoyo hacia Ucrania - afirmó que llevó a cabo conversaciones al respecto con Modi y que respeta la libertad de decisión estratégica de India, pero que se debe “romper con la dependencia de los combustibles fósiles”. También, Modi expresó que se reconoce como “amigo de Putin”, pero vela por el fin de la guerra en Ucrania mediante el camino del “diálogo y la diplomacia”.
Una vez que se lleve adelante el acuerdo, tocará hacernos las siguientes preguntas: ¿El Reino Unido busca recuperar su protagonismo en la India o busca moderar la influencia rusa en Nueva Delhi?
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