En el 1995 asumía como gobernador de Formosa Gildo Insfrán, después de dos mandatos como vicegobernador de la misma provincia. Hoy, 2021, el mandato sigue en pie. Gildo es uno de los antiguos peronistas, en una provincia gobernada por esta fuerza política hace 33 años. Ahora Formosa está bajo la lupa de muchísimos argentinos, no solo por sus estadísticas para nada alentadoras sino por ciertas medidas de corte dictatorial. Hace aproximadamente un año que el presidente Fernández visito la provincia. En esa visita, el discurso de Alberto fue un inmenso palabrerío con múltiples elogios dirigidos para el gobernador de una de las provincias más pobres del país. No hizo más que felicitarlo a Insfrán por su gestión y hasta se animó a ponerlo como ejemplo de gobernador, que valentía la del presidente.
Estas líneas tienen
como objetivo demostrar que Insfrán está a kilómetros de ser un gobernador
ejemplar, pero otra meta aún más motivadora, es la de repudiar enérgicamente
todo modelo o medida dictatorial. Precisamente hoy 24 de marzo, los argentinos
recordamos lo sucedido en el 76 con el golpe de Estado por parte de los
militares, y estamos acostumbrados a que nuestra dirigencia (especialmente un
sector) repudie la dictadura con una verborragia que incluye conceptos como el
de los derechos humanos. Ruego a los funcionarios y especialmente al
presidente, que repudie absolutamente todas las dictaduras. Eso les daría valor
y coherencia a sus alardeos constantes sobre sus atributos de catedrático de la
democracia. No los hemos visto rasgarse las vestiduras con la brutal dictadura
de Maduro en Venezuela, tampoco con la de Cuba. Muy por el contrario, los hemos
visto apoyar sin escrúpulos a las dictaduras más crueles, siempre y cuando sean
afines a su ideología. Pero para los argentinos preocupados por las
características más fascistas del Kirchnerismo duro, lo de Formosa se siente ya
mucho más cercano que cuando temíamos parecernos al modelo venezolano.
Quiero empezar con
la tarea más simple, que es la de demostrar que Insfrán no solo no es un
ejemplo de gobernador, sino que su gestión es deplorable. Habiendo gobernado el
peronismo durante 33 años, 25 con Insfrán de gobernador y 8 como
vicegobernador, no hay nadie más responsable por Formosa que al actual gobernador.
No hay terceros para echar culpa, recurso que el kirchnerismo explota y que le
ha dado resultados muy efectivos. No solo no hay nadie a quien culpar, sino que
por el contrario la provincia fue altamente favorecida por el régimen de
coparticipación, hecho que voy a detallar en el siguiente párrafo.
En Formosa la
pobreza es de más del 40% y la indigencia del 9%. Es la segunda provincia, después de
Corrientes, con mayor mortalidad infantil y encabeza el ranking de mortalidad
materna. El 40% de la población no tiene agua potable. Hay 1 trabajador privado
cada 1,7 trabajadores públicos, es decir, el 70% de los formoseños trabajan en
el Estado. Ósea que el 30% mantiene al resto. Lo único que permite este nivel
de desequilibrio fiscal es el régimen de coparticipación, y acá viene un dato
impactante. Formosa recauda solo un 0,08 de lo que recibe por coparticipación.
La provincia es mantenida por el gobierno nacional en su gran mayoría, con lo
que recauda de otras provincias. Estos números pintan de alguna manera la durísima
realidad de Formosa, a la cual es sometida hace varios años por sus
gobernantes. Es un delirio hablar de una gestión ejemplar cuando uno lee estos
datos. Con sus dichos, el presidente subestimo la inteligencia de los
argentinos y nosotros subestimamos su descaro.
La otra cara de la
moneda va más allá de ciertos datos numéricos que abruman y se trata de un aire
dictatorial que se respira en Formosa, que se intensifico con la pandemia como
justificación. Hace unos días se supo que alrededor de 100 mujeres embarazadas
de la comunidad wichi, se esconden en el monte por miedo a que las separen de
sus bebes. El supuesto protocolo sanitario de la provincia consiste en separar
al bebe de la madre cuando nace, por 15 días. Hubo un caso de una mujer embarazada
que fue al hospital con dolor de cabeza y le practicaron una cesárea a sus 7
meses de embarazo. Él bebe murió. Esto es contado por las mismas mujeres que
están escondidas en una nota que les hizo telenoche. Las entrevistadas hablan
con la cara tapada por miedo a ser reconocidas por las autoridades formoseñas y
cuentan que viven en carpas de nylon hace meses. Relatan aterrorizadas que la
policía las busca de noche por el monte a caballo y que no ven a su familia
hace mucho. Uno se pregunta, ¿Dónde está el Gobierno Nacional? ¿O el Ministerio
de la mujer? Ambas entidades dieron su respuesta cuando Insfrán fue invitado el
8 de marzo a un acto nacional por el día de la mujer. Vimos la foto del
gobernador con la ministra de mujeres, Eli Gómez Alcorta, firmando un pacto
contra la violencia de genero. Queda demostrado que el pacto es un show
político (de los que nos tienen acostumbrados) en el momento en el que lo firma
el gobernador de una provincia con 100 mujeres embarazadas, escondidas en un
bosque por miedo a la policía. Las mujeres se esconden del Estado y de la
policía sin hacer nada ilegal, eso es propio de una dictadura.
Uno de los deseos más
fuertes de Cristina Fernández de Kirchner siempre fue terminar con la libertad
de expresión y cualquiera que la exponga a ella o a sus gobiernos. Lo intento
hacer por varias vías (ley de medios, amenazas, sobornos, escraches, etc.) pero
nunca lo logro por completo. Este anhelo kirchnerista parecería estar muy
avanzado en Formosa, provincia en la cual nadie puede disentir con el gobierno.
He visto entrevistas a alumnos del secundario que temen opinar sobre el manejo
de su provincia por miedo a las consecuencias. Sin ir más lejos, todos vimos la
brutal represión de las fuerzas policiales de Gildo Insfrán sobre manifestantes
que iban en contra de volver a la fase 1 de la cuarentena. Hubo heridos graves
e incidentes. Palazos, balas de goma y gases lacrimógenos. Hubo una periodista
detenida por hacer su trabajo y mostrar lo que estaba pasando. Agustín Rojas,
un influencer muy crítico de Insfrán fue uno de los 93 detenido en las
protestas y denuncio que le dieron una golpiza en la comisaria. Patrón que se
repite, las fuerzas policiales abusando de poder contra ciudadanos moviéndose
dentro del margen de la ley. Fuerzas policiales que más que pertenecer al
Estado, parecieran soldados del líder, Insfrán. Los efectivos policiales
marchan al ritmo de “Saben bien que va a pasar, Gildo en Formosa va a
triunfar”. Se nota que están al servicio del gobernador y no de los
provincianos.
Este 24 de marzo,
propongo tener memoria, acordarnos del pasado para que no se repita en ningún
grado y en ningún rincón de nuestro país. También hacerle honor a la verdad,
eso requiere de coherencia entre lo que pienso, lo que digo y lo que hago. Y por
último ajustar el concepto de justicia, para que nuestro juicio no se nuble con
aquel que tiene mí misma ideología o simplemente es de mi agrado.
Escrito por Juan Urien
Comentarios
Publicar un comentario
Dejanos tu opinión acerca del tema.