Martín Miguel de Güemes y Manuel Belgrano: Una Relación de Respeto y Amistad en la Lucha por la Independencia

 Por Naiara Nella Gnes Fuentes

IG: @naiaragnes1  

En esta semana de junio, recordamos a Manuel Belgrano y Martín Miguel de Güemes, dos figuras clave de la independencia argentina. Belgrano, nacido el 3 de junio de 1770, destacó por su papel en la creación de la bandera y su liderazgo militar en el norte del país. Güemes, nacido el 8 de febrero de 1785, fue conocido por su defensa del noroeste argentino mediante tácticas de guerrilla durante la "Guerra Gaucha". A pesar de sus diferencias, Belgrano y Güemes compartieron una amistad y respeto mutuos que se reflejaron en sus intercambios de cartas y en su colaboración estratégica durante la lucha por la independencia. Su legado perdura como ejemplo de unidad y compromiso con la libertad de Argentina.


En esta semana de junio, recordamos con especial reverencia a dos grandes figuras de nuestra historia: Martín Miguel de Güemes y Manuel Belgrano. Estos próceres, cuyo legado ha sido fundamental en la lucha por la independencia argentina, no solo compartieron una causa común, sino también una relación marcada por el respeto y la amistad. Sus historias y logros son pilares en la construcción de la nación que hoy conocemos.

Manuel Belgrano, nacido el 3 de junio de 1770, es conocido por su multifacética carrera como abogado, economista, periodista y militar. Fue un ferviente defensor de la educación, la agricultura y la industria como pilares para el desarrollo del país. Su legado más visible es la creación de la bandera argentina el 27 de febrero de 1812, símbolo de la lucha y la identidad nacional. Belgrano tuvo un rol crucial en la organización y conducción de las fuerzas patriotas en el norte del país, donde logró importantes victorias como las batallas de Tucumán y Salta, contribuyendo significativamente a la independencia argentina. 

Nacido el 8 de febrero de 1785, Martín Miguel de Güemes se destacó como militar y líder gaucho. Su principal aporte fue la defensa del noroeste argentino frente a las invasiones realistas, utilizando tácticas de guerrilla que resultaron altamente efectivas. Güemes lideró lo que se conoce como la "Guerra Gaucha", donde los gauchos, conocidos como "Los Infernales de Güemes," jugaron un papel esencial en hostigar y debilitar a las fuerzas españolas, permitiendo así la consolidación de la independencia en la región. 

La relación entre Belgrano y Güemes se construyó en el contexto de la guerra por la independencia. A pesar de las diferencias en sus métodos y orígenes, ambos compartían un profundo compromiso con la causa patriota. Una de las anécdotas más destacadas de su relación es el intercambio de cartas a comienzos de 1800. Estas misivas reflejan tanto la colaboración estratégica como la amistad y el respeto mutuo. En una ocasión, Belgrano amonestó a Güemes por su relación con una mujer casada con un militar, lo que muestra la honestidad y franqueza en su comunicación. Sin embargo, esta situación no afectó la sólida alianza entre ambos. Güemes, por su parte, siempre mostró un profundo respeto por Belgrano, reconociendo su liderazgo y visión estratégica. Belgrano, en varias de sus cartas, expresó admiración por la valentía y la efectividad de las tácticas de guerrilla empleadas por Güemes y sus gauchos. 

El legado de Belgrano y Güemes perdura en la memoria colectiva de Argentina. Belgrano es recordado no solo por su papel en la independencia sino también por su visión de un país próspero y educado. Güemes, por su parte, es celebrado como el defensor del norte argentino y símbolo de la resistencia gaucha. Instituciones como el Instituto Nacional Belgraniano y el Instituto Güemeciano de Salta continúan trabajando para preservar y difundir la obra y el pensamiento de estos próceres. Estas organizaciones juegan un rol fundamental en la educación y el reconocimiento de su legado. 

En eventos recientes, como la charla organizada en el Teatro Real de Córdoba, los descendientes de estos héroes han tenido la oportunidad de compartir documentos y anécdotas que permiten al público conectar de manera más directa con la historia. La presentación de una carta manuscrita de Belgrano a Güemes durante este evento fue un momento particularmente emotivo y significativo. 

La historia de la independencia argentina no estaría completa sin la mención de figuras como Manuel Belgrano y Martín Miguel de Güemes. Su relación, basada en el respeto mutuo y la amistad, fue crucial para el éxito de la causa patriota. Hoy, sus legados siguen vivos, inspirando a nuevas generaciones a valorar y proteger la libertad y la identidad nacional que tanto costó conseguir.     

Ambos murieron con apenas un año de diferencia, lo que resalta aún más la conexión entre sus vidas y sus destinos en la lucha por la libertad. Recordar la amistad entre estos dos pilares de la emancipación es una forma de reconocerlos como hombres, no solo con un objetivo común, sino también por su afinidad y camaradería en tiempos de guerra. 

“Cuando digo amigo, lo soy y lo seré siempre, como lo soy de Ud; sin embargo de que me han querido persuadir de lo contrario,” escribió Belgrano a Güemes desde Tucumán el 10 de noviembre de 1816, poco después de la declaración de la Independencia. Esta muestra de amistad destaca la relación personal y profesional que compartieron, enfrentando juntos no solo a los enemigos externos, sino también a aquellos que intentaron sembrar discordia entre ellos.

A lo largo de su correspondencia, que abarca más de 300 cartas, se observa cómo Belgrano y Güemes construyeron una amistad sólida y se apoyaron mutuamente en momentos difíciles. Güemes expresaba verdadera amistad hacia Belgrano, como lo demuestra su correspondencia. Encabezaba sus cartas a Belgrano con expresiones como “amado amigo y compañero de todos mis afectos”. “compañero y amigo el más querido”, y “mi mejor amigo y compañero”. No solo discutían sobre estrategias militares y políticas, sino también sobre cuestiones personales y cotidianas. Por ejemplo, Belgrano se preocupaba por la salud de Güemes, aconsejándole sobre cuidados médicos, mientras que Güemes ofrecía su apoyo enviando a su médico personal para atender a Belgrano.Estas cartas revelan la humanidad de los próceres, mostrando que, más allá de sus roles oficiales, eran amigos que se preocupaban sinceramente el uno por el otro. La amistad entre Belgrano y Güemes es un recordatorio de la importancia de la camaradería y el apoyo mutuo en tiempos de adversidad. 

En esta semana de junio, al recordar a Belgrano y Güemes, honramos no solo sus contribuciones a la independencia argentina, sino también la amistad y el respeto que los unió en tiempos de guerra. Su relación, forjada en el crisol de la lucha por la libertad, nos enseña sobre la importancia de la colaboración y la lealtad en la construcción de un proyecto común.

El legado de Manuel Belgrano y Martín Miguel de Güemes trasciende sus logros militares y se inscribe en el ámbito de los valores humanos. Sus esfuerzos conjuntos fueron cruciales para la emancipación de la nación, y su amistad se convierte en un símbolo de la unidad necesaria para superar los desafíos más grandes. Al rememorar su historia, no solo celebramos a dos héroes, sino también la fraternidad y el compromiso inquebrantable que los caracterizó.

En tiempos actuales, donde la cooperación y la solidaridad son más necesarias que nunca, el ejemplo de Belgrano y Güemes resuena con una relevancia especial. Sus vidas y su relación nos recuerdan que, a pesar de las adversidades y las diferencias, es posible trabajar juntos hacia un objetivo común, inspirando a las generaciones presentes y futuras a valorar y proteger la libertad y la identidad nacional que tanto costó conseguir.


Comentarios

Publicar un comentario

Dejanos tu opinión acerca del tema.